¿Alguna vez te has preguntado qué pasaría si simplemente dejaras de participar? En "Un hombre que duerme", Georges Perec nos sumerge en la mente de un joven estudiante de Sociología en París que, un buen día, decide abandonar sus obligaciones, sus estudios y sus relaciones, sumergiéndose en una indiferencia radical hacia el mundo que lo rodea. Desde su pequeña buhardilla, o vagando por las calles parisinas, este protagonista sin nombre se convierte en un observador pasivo de su propia vida, un sonámbulo que transita sin rumbo fijo por cines, plazas y museos. Esta novela, escrita en una inquietante segunda persona, nos invita a una profunda introspección sobre la soledad, la apatía y el existencialismo. Perec, conocido por su maestría lingüística y experimentación, explora con sutileza las implicaciones de una vida donde el "no hacer" se convierte en la única acción posible, desafiando nuestras nociones de ambición y conexión social. Es una obra cumbre de la "literatura Oblomov" o "Bartleby", que resuena con la eterna búsqueda de sentido en un mundo que a menudo nos empuja a seguir el rebaño. Leer "Un hombre que duerme" es una oportunidad para reflexionar sobre la presión de las expectativas y la posibilidad de un exilio interior. Su estilo narrativo te atrapará en la experiencia del protagonista, haciéndote cuestionar tu propia relación con el entorno. Para los lectores chilenos, esta novela ofrece una perspectiva única sobre la resistencia pasiva y la búsqueda de identidad individual frente a lo colectivo, temas que siguen siendo relevantes en nuestro contexto. Sumérgete en esta peculiar aventura de la inacción y descubre lo mucho que puede decir el silencio.