Un pedacito de tierra baldía, ¿puede realmente transformar un vecindario completo? Descubre la conmovedora respuesta en "Semillas" de Paul Fleischman. Esta novela coral nos lleva a un deteriorado barrio de Cleveland, habitado por inmigrantes de distintas partes del mundo, donde un terreno lleno de basura es el escenario de un cambio inesperado. Todo comienza cuando Kim, una niña vietnamita de nueve años, siembra unas humildes semillas de frijol para honrar la memoria de su padre. Su pequeño acto de esperanza despierta la curiosidad y, poco a poco, otros vecinos de orígenes tan diversos como rumanos, guatemaltecos, coreanos, indios o mexicanos, comienzan a reclamar su propio espacio en el lote, transformándolo en un vibrante jardín comunitario. A través de las voces de trece personajes, cada capítulo nos revela sus historias personales, sus luchas y cómo el simple hecho de cultivar la tierra los une, rompe barreras y teje una red de comunidad y apoyo mutuo. "Semillas" explora con sensibilidad temas universales como la diversidad cultural, la inmigración, la superación de la soledad y la construcción de identidad en un nuevo lugar. Nos invita a reflexionar sobre el poder de la conexión humana y cómo un espacio compartido puede florecer en medio de la adversidad. La experiencia de personajes como Maricela, una adolescente embarazada mexicana, o Gonzalo, un joven guatemalteco, resuenan profundamente, mostrando cómo la tierra se convierte en un refugio y un punto de encuentro para quienes buscan echar raíces lejos de su hogar. Este libro es valioso porque, más allá de ser una historia sobre un jardín, es una poderosa metáfora sobre cómo la cooperación y el respeto por las diferencias pueden cultivar una sociedad más inclusiva y empática. Ha sido reconocido con premios importantes como el ALA Best Book for Young Adults y el Jane Addams Children's Book Award, y su mensaje de esperanza y comunidad lo hace especialmente relevante para los estudiantes y docentes en Chile, un país que celebra su propia diversidad y el valor de la unión. Te invitamos a sembrar tu propia curiosidad y dejarte llevar por esta historia que te recordará que, a veces, un pequeño gesto puede dar grandes frutos.