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Fernando Emmerich Leblanc (Valparaíso, 1932-2020) fue una figura multifacética en el panorama literario y cultural chileno, destacándose como narrador, traductor, ensayista y profesor universitario. Originario de Valparaíso, su obra exploró con frecuencia temas como la nostalgia, la inocencia de los primeros amores y la particularidad de la vida provinciana, elementos que le confirieron un sello distintivo en la literatura nacional. Su trayectoria abarcó también roles relevantes en el periodismo y la crítica literaria, siendo editor de la revista *Qué Pasa*, director de la revista cultural *Andrés Bello* y redactor del diario *El Mercurio*. Emmerich fue un autor prolífico, con más de veinte libros publicados. Entre sus títulos más reconocidos se encuentran las colecciones de cuentos *Los lobos y los magnolias* (1982) y *Las flores de hojalata* (2007), así como las novelas *Los árboles azules* (1984), *Adiós al paraíso* (1994) y *Diamantino* (1996). Su contribución fue ampliamente reconocida con numerosos galardones, incluyendo el Premio Municipal de Santiago en las categorías de cuento (1983) y ensayo (2006). Además, su obra ha trascendido las fronteras nacionales, siendo traducida al inglés, francés, alemán y portugués.

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Carlos Cárcamo Luna es un destacado diseñador gráfico, publicista e ilustrador chileno, nacido en la ciudad de Los Ángeles. Se formó en la Universidad de Chile, sede Temuco, y comenzó su trayectoria profesional en 1978 en la Corporación Nacional Forestal (Conaf). Su carrera lo llevó a Brasil, donde contribuyó con la creación de cómics para Hanna Barbera y animaciones para comerciales. Posteriormente, residió en Barcelona, España, donde continuó su trabajo en animación e ilustración de textos escolares. En 1985, Cárcamo Luna regresó a Chile, dedicándose a la ilustración publicitaria, la creación de dibujos animados y la ilustración de libros para diversas empresas. En este período, fue el artífice de los icónicos personajes de "La Pandilla de Mr. Kill" para las campañas de Copec, logrando un notable éxito y reconocimiento. También trabajó en humor gráfico para el Diario Austral de Temuco, antes de establecerse en Collipulli. Con el tiempo, Carlos Cárcamo se ha enfocado en la pintura, estableciendo un taller donde comparte su arte y ofrece clases. Su obra ha sido exhibida en diversas comunas del sur de Chile. A lo largo de su carrera, ha sido reconocido con premios internacionales por sus comerciales animados en Estados Unidos y Europa, y en Chile obtuvo el premio a la mejor ilustración del año otorgado por el diario El Mercurio.