¿Cansados de las típicas princesas que solo esperan a su príncipe? Prepárense para conocer a Isabella, una princesa que no encaja en el molde y que prefiere ensuciarse las manos antes que pulir su corona. En "La princesa Isabella", Cornelia Funke nos presenta a la menor de tres hermanas reales, quien está aburrida de la vida palaciega, los vestidos delicados y la constante vigilancia de sus sirvientes. Isabella rompe con todas las expectativas al lanzar su corona al estanque, declarando que ya no quiere ser princesa. Su padre, el rey, intenta "disciplinarla" enviándola a trabajar en la cocina y el chiquero, esperando que así recupere el gusto por su vida real. Sin embargo, el plan del rey toma un giro inesperado cuando Isabella descubre una libertad y alegría genuina en estas nuevas tareas, ¡muy lejos de las reverencias y los modales de palacio! Este entretenido cuento ilustrado explora con humor la importancia de la individualidad y la búsqueda de la propia identidad. Cuestiona los estereotipos de género y las expectativas sociales, mostrando que la verdadera felicidad no se encuentra en una corona, sino en hacer lo que uno realmente ama. Para los lectores chilenos, esta historia es valiosa porque invita a reflexionar sobre la importancia de la autenticidad y el coraje de seguir un camino propio, rompiendo con lo establecido y encontrando goce en las cosas simples. Si buscan una historia que celebre la libertad, la creatividad y el valor de ser uno mismo, "La princesa Isabella" les encantará. Descubran cómo esta peculiar princesa nos enseña que a veces, para encontrar nuestro lugar, hay que atreverse a romper las reglas.