¿Qué pasa si un manual, en vez de guiarte, te invita a perderte en los placeres más auténticos de la vida? "El último manual de los bebedores" de Tito Matamala te desafía a explorar precisamente eso, con un ingenio y una picardía muy chilenas.

En este ensayo, Matamala se consagra como un experto en el universo de los "copetes y cantinas", invitándonos a un recorrido por la cultura del beber con mayúsculas. No esperes recetas ni lecciones moralizantes; aquí, el autor despliega una filosofía profunda sobre el acto de beber, elevándolo a la categoría de un ritual y una forma de vivir. Se define al "buen bebedor" no como un alcohólico, sino como un "caballero, un sujeto sano, pacífico y humilde", para quien el alcohol es un "compañero de ruta, un amigo fraterno". Es una oda a la tertulia, al pensamiento y a ese "perder el tiempo para ganar la esperanza" que tanto resuena en nuestra idiosincrasia.

Los temas centrales giran en torno a la identidad chilena a través de sus bebidas y sus espacios de reunión, la valoración de la amistad y la búsqueda de sentido en lo cotidiano. Matamala nos invita a reflexionar sobre la importancia de las pequeñas grandes cosas, a rechazar lo "colorinche de los picantes" y a apreciar lo genuino, como un buen "fermento de uva nacional". Este manual es valioso porque, a pesar de describirse jocosamente como "inútil" y que "no sirve para nada", paradójicamente nos enseña a mirar con otros ojos esa parte de nuestra cultura que a menudo se subestima.

Es un libro fascinante para estudiantes, profesores y bibliotecarios chilenos que busquen una reflexión sagaz y entretenida sobre la bohemia, la amistad y una parte intrínseca de nuestra "chilenidad". Atrévete a descubrir la sabiduría oculta en cada sorbo.