¿Sientes que el torbellino digital nos aleja de lo verdaderamente humano? Pedro Salinas, con su aguda mirada, nos invita a pausar y reflexionar en "El defensor", una colección de ensayos escrita desde su exilio puertorriqueño entre 1942 y 1946. En estas páginas, el autor, miembro destacado de la Generación del 27, se erige como un guardián de "formas tradicionales de la vida del espíritu" que veía amenazadas por el progreso y la mecanización. El corazón de este libro reside en la defensa apasionada de pilares fundamentales para el ser humano. Salinas nos habla de la belleza y profundidad de la correspondencia epistolar, un acto de recogimiento y meditación que fomenta la conexión íntima. Nos interpela sobre la lectura fértil y reposada, contraponiéndola a la superficialidad. También reivindica la capacidad creadora de las minorías literarias y, con perspicacia, distingue entre los "viejos analfabetos" y los "neoanalfabetos" de su tiempo, aquellos que, sabiendo leer, renuncian voluntariamente a la lectura profunda. Finalmente, defiende el lenguaje mismo, esa herramienta prodigiosa para la expresión del ser y la convivencia. "El defensor" es una obra invaluable para estudiantes, profesores y bibliotecarios chilenos, ya que sus reflexiones, aunque escritas hace décadas, resuenan con una sorprendente actualidad en nuestra sociedad saturada de información instantánea y comunicación efímera. La prosa clara y profunda de Salinas nos desafía a cuestionar nuestros propios hábitos de consumo cultural y a valorar la riqueza del pensamiento crítico y la expresión cuidadosa. Este libro es una invitación a redescubrir la trascendencia de actos tan cotidianos como leer, escribir y dialogar, animándonos a ser los defensores de nuestra propia vida espiritual.