¿Hasta dónde estarías dispuesto a transar tus principios por mantener tu posición y el bienestar de tu familia? Esa es la pregunta que resuena con fuerza en "Deja que los perros ladren", la aclamada obra de Sergio Vodanovic. En este clásico del teatro chileno, conocemos a Esteban, un respetable funcionario público cuya vida tranquila se ve sacudida por una orden inescrupulosa. Debe fabricar un informe falso para clausurar un periódico opositor al gobierno, bajo la amenaza de perder su empleo. Esta decisión lo sumerge en un profundo conflicto ético, que no solo pone en jaque su integridad personal, sino que también desestabiliza su hogar y la relación con su hijo Octavio, un joven estudiante de derecho con ideales propios. Vodanovic nos invita a reflexionar sobre la corrupción política, la censura y la delgada línea entre la conveniencia personal y los valores morales. La obra, estrenada originalmente en 1959, sigue siendo sorprendentemente actual, ofreciendo una crítica mordaz a la ética vacilante en la sociedad y a las presiones que enfrentamos al defender la libertad de expresión. Es un espejo de las contradicciones de la clase media chilena y de la tensión entre el idealismo y el pragmatismo. Leer "Deja que los perros ladren" es sumergirse en un drama intenso que provoca debate y autoexamen. Este galardonado texto teatral, considerado un clásico inquietante, es fundamental para entender aspectos permanentes de nuestra identidad y conflictos como sociedad. Te invitamos a descubrir por ti mismo la vigencia de sus interrogantes y a debatir sobre sus poderosos temas.